La cirugía de afirmación genital, también conocida como reasignación genital, puede ser realizada mediante diferentes técnicas que permiten adaptar los genitales al género de la persona transgénero.
En IM GENDER somos expertos en las tres técnicas diferentes de vaginoplastia disponibles, como la vaginoplastia por inversión peneana, la vaginoplastia por inversión peneana con injerto y la colovaginoplastia.
En IM GENDER contamos con las herramientas y tecnologías más avanzadas para realizar la vaginoplastia trans con total seguridad. Nuestro equipo está en formación continua y cuenta con una gran trayectoria en este tipo de cirugía genital. Entendemos las distintas preferencias sexuales que pueden tener las personas trans, por lo que también llevamos a cabo la vulvoplastia, una opción que ofrece la misma estética y sensibilidad que la vaginoplastia, pero sin la creación del túnel. Además, estamos constantemenete introduciendo nuevos conceptos y tecnologías.
Sabemos que cada persona es única y tiene necesidades distintas, por eso ofrecemos una atención personalizada que se adapta a tus necesidades. Nuestro equipo estará a tu lado para guiarte y acompañarte en todo momento, desde la primera consulta hasta el postoperatorio. Nos aseguramos de que el proceso de la vaginoplastia sea lo más seguro y cómodo posible para que puedas disfrutar de los resultados de forma segura y sin preocupaciones.
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Existen 3 tipos de vaginoplastia para la mujer transgénero que os explicamos con detalle a continuación.
La vaginoplastia por inversión peneana se lleva a cabo cuando el tamaño, el grosor, la longitud y la calidad de la piel del pene permite realizar un tunel vaginal con una anchura y unas dimensiones sufientes para mantener relaciones sexuales con normalidad.
La colovaginoplastia se realiza cuando el pene es pequeño o ha habido una circuncisión importante previa a la intervención de vaginoplastia. También se da cuando ha habido una falta de desarrollo del pene como consecuencia del uso de inhibidores hormonales durante la etapa previa a la pubertad. En estos casos, la técnica de inversión peneana está desaconsejada, ya que la profundidad vaginal sería muy poca y no permitiría a la mujer trans tener una vida sexual con penetración satisfactoria.
Cuando se da la circunstancia que la mujer trans no tiene un pene de dimensiones adecuadas para una inversión peneana satisfactoria, pero que tampoco requiere de una colovaginoplastia, se puede optar por realizar lo que conocemos como vaginoplastia con injerto que permitirá conseguir una vagina de una profundidad y unas dimensiones satisfactorias sin necesidad de acudir a la técnica de colgajo rectosigmoidal pediculado.
La vaginoplastia trans logra construir una vagina desde cero a partir de tejidos del pene, o incluso, mediante un injerto de colon. Gracias a esta cirugía las mujeres transgénero consiguen tener el cuerpo que tanto desean y mejorar tanto su calidad de vida como su bienestar emocional. Es una cirugía genital que está especialmente destinada a aquellas mujeres transexuales que la demandan como parte de su tránsito. Además, cabe tener en cuenta que también la suelen demandar las personas que sufren disforia de género, aquella sensación de incomodidad o angustia que pueden sentir las personas cuya identidad de género difiere del sexo asignado al nacer o de las características físicas relacionadas con el sexo.
Si vas a someterte a una vaginoplastia trans, puedes plantearte la opción de guardar esperma – criopreservación de esperma – antes de realizarte esta cirugía, en el caso de que desees tener hijos biológicos.
Gracias a la vaginoplastia trans se consigue una vagina funcional, estética y erógena que permite la penetración y el placer sexual. La profundidad vaginal dependerá de diversos factores, entre los que se encuentra la técnica utilizada y la cantidad de piel peneana. Es importante seguir los consejos del equipo médico, especialmente en cuanto a curas y dilataciones para conseguir los mejores resultados.
El cirujano te informará de cómo prepararte para la operación antes de ella con todo detalle. Además, existen pasos previos que serán importantes llevar a cabo antes de la vaginoplastia trans, como realizar análisis y revisiones médicas, revisar los antecedentes de salud familiares, revisión de vacunas, etc. Cuando visites al médico se te explicará todo y se te aclararán todas las dudas que puedan surgir.
Sí, ingresarás un día antes de someterte a la operación en IM CLINIC. Durante ese día se te realizarán todas las pruebas pertinentes y una limpieza de intestino, mediante el consumo de laxantes y antibióticos. Realizar la limpieza intestinal es imprescindible debido a la proximidad entre el intestino y la nueva vagina que se creará. Tras la operación, deberás permanecer en la clínica al menos una semana para que el cirujano pueda seguir tu evolución y te proporcionamos los cuidados necesarios para tu absoluta recuperación.
La vaginoplastia trans es una técnica que algunas pacientes solicitan para completar el proceso de tránsito, aunque no es una cirugía que se requiera de manera obligatoria en la transexualidad femenina.
Cuando una mujer trans solicita una cirugía de afirmación genital o vaginoplastia, el equipo médico debe planificar bien la intervención atendiendo a sus necesidades, el historial médico, las características y las circunstancias personales de cada mujer. Será dicho equipo quien valorará cada caso de vaginoplastia clasificándolo en tres grandes grupos que describimos más abajo. De esta clasificación surgirá la técnica que se seguirá para conseguir una vagina funcional y estéticamente completa.
TESTIMONIOS DE NUESTROS PACIENTES
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